sábado, 29 de octubre de 2011

Apología de lo banal

La definición del dominio entre el ocio,
el trabajo y las necesidades:
ahí.

La extensión entre dos acciones productivas,
la superficie entre el hacer
y la nada:
ahí.

Emancipar el territorio,
expandirlo,
constituir una autonomía plenipotenciaria,
ahí,
sin injerencias de Lo Importante:
capitalizar el tiempo perdido,
elogio de la procrastinación.

Violar las fronteras del asueto y del deber,
ampliar el reino de las cosas menos urgentes
hasta el límite de la periferia:
reivindicar el no
hacer nada.