Espíritu que atraviesa el cuerpo,
veo a través de tus ojos
sangro a través de tus heridas
y algunas noches
aprieto con fuerza tu pecho
para que tú no dejes de existir.
Aliento que recorre la historia
alimento de pastos ajenos
susurro que sólo se anuncia
a través de todas las bocas.
Tuyo es el verbo
creador de sustantividades,
tuya es la interpretación
que se impondrá al resto de relatos
escritos antes con sangre de otros.
Ahora
vuelve a tu fundamento.
El mundo físico es un código
deflagración de la materia
tu cuerpo
precipitación de carne, sangre y huesos
tan propio y extraño que puede modificarse
y separarse también.
Sepárate,
suéltate y respira.
Tu locura es una enfermedad,
una lectura errada de una visión particular,
una ilusión.
Conviértela en otra canción,
la melodía que tatarearán
los nacidos muertos
que regresarán la guerra
contra esta realidad.