sábado, 30 de diciembre de 2017

No soy buena persona

No soy buena persona,
no me importa tu vida
si no nos suenan igual las tripas
si no nos duelen, aunque sean ajenas,
cada una de sus heridas.
No tengo remordimientos
si al cruzarnos en un mal gesto
hundí mi rabia en tu pecho
o cosí tu barriga con miedos.
Para matarme ya estoy yo,
tú sólo serías un medio.
No dudo de las buenas intenciones,
pero la rueda sigue girando
y sólo intercede por los osados,
los que se estremecen frente al espejo
y con su alambre de ira y amargura
rajan y escarban sus adentros
hasta corromperse por completo.

No soy buena persona
ni pretendo serlo,
la piel se derrite tras la máscara
como una candela, los ojos de brea,
los dientes son huesos de tu calavera
y la muerte espera, aburrida y cansada,
el momento que olvides
que esto es la guerra.

martes, 26 de diciembre de 2017

ANTIANGELVS | VNID∆D |

Lo que otros dicen de él
no me basta
-espero que a ti tampoco.
Yo soy como él
y él es como yo.
Soy tan pobre y tan rico como él,
no hay nada que él tenga
que a mí me pueda faltar
ni nada que él añore
que yo no desee también.
Soy tan fuerte como él
y él es del mismo tamaño que yo,
no está por encima de mí
ni yo a rebufo de él.
No cree en la muerte
si muere a cada instante
y se encuentra cada vez
con mejor salud que antes.
Él está en mí
y yo estoy en él.
Nada tiene sentido sin él,
con él hasta la nada tiene sentido.

domingo, 17 de diciembre de 2017

PØDER

Quién no querría morir sabiendo
que sus tripas sobrevolarán las montañas
entre los picos sangrientos
de los buitres
en vez de carcomerse en vida
hasta extinguirse lentamente
rodeado de rostros sin cara
en una caja de conglomerado de pino.

Miedo al silencio
miedo a la soledad
miedo al miedo
y dejar de dormir
de segregar dopamina
de metabolizar glucosa
modo supervivencia ante la Máquina
sacrificios autorreferenciales
industrias e instituciones creadas
para cada una de mis emociones
e imponer
frente al lenguaje del control social
mi patria eslava
mi propio idiolecto
donde nunca
hubo nada.

Escribo por revelación.
No razono, ni pienso,
tan solo transmito el misterio
de los susurros de aliento sofocante
de eso que llaman mi humanidad.
Maldita humanidad.