viernes, 30 de diciembre de 2011

CONTRA CUALQUIER TIPO DE CENSURA

Bebelplatz en 1933 / Fahrenheit 451 / Actuable.es: firmas contra un libro homófobo

Estoy radicalmente a favor de la libertad de cualquier expresión y por lo tanto en contra la censura, cualquiera que sea. Mi posicionamiento va más allá del artículo 19º de la Declaración Universal de los Derechos Humanos o del derecho amparado en las constituciones pseudodemocráticas. No me baso en ninguna corriente filosófica ni citaré a Monstesquieu, Voltaire o a Rousseau. Para mi es un derecho inquebrantable que va más allá de las leyes y de las ideologías, un principio que debe prevalecer sobre cualquier interés social, individual o jurídico, incluso por encima de las limitaciones del principio de daño o de delito para casos como la pornografía o del "discurso del odio".

A lo largo de la historia se han producido demasiados episodios de censura amparados en argumentos de todo tipo: la quema de libros y el asesinato de autores durante el reinado de Qin Shi Huan en el 212 a.C., la destrucción de la biblioteca de Alejandría por parte Julio César (48 a.C.), Aureliano (273) y Dioceclano (297), la famosa Hoguera de las Vanidades de Girolamo Savonarola en el siglo XV, la eliminación de los códices mayas ordenada por el sacerdote Diego de Landa en 1562, la quema de libros durante el régimen nacionalsocialista en Alemania (hoguera de Bebelplatz, 1933) o la destrucción de libros durante las dictaduras de Chile (1973) y Argentina (1976), entre otros muchos. 

La censura moderna -tanto institucional como ciudadana- utiliza métodos menos catárquicos: desde la prohibición de imprimir y difundir una obra concreta hasta boicotear su distribución en librerías. Bajo todas estas acciones, por muy dispares que parezcan entre si, está el mismo afán de acallar las opiniones o formas de expresión contrarias a las de un régimen político o una sociedad concreta. La excusa del paganismo, la blasfemia, la incitación al odio o los contenidos sexualmente ofensivos tienen un mismo origen: la intolerancia respecto a la libertad de expresión de otros puntos de vista u otras formas de pensamiento.

Yo defiendo que cualquier persona es libre de pensar y expresarse como quiera. El único límite que establezco en esta afirmación está precisamente fuera del concepto de expresión: nadie tiene derecho a agredir a otra persona por cuestiones ideológicas o religiosas. Estoy contra de cualquier imposición estética, ética, ideológica o mística sobre cualquier otra persona. Yo sé que la mayoría de los humanos piensan de forma distinta a mi, incluso muchos de forma opuesta. Lo acepto. Asumo que muchos odiarán mi modo de vida, de expresión, incluso mi existencia. No me importa. Jamás negaría a nadie poder expresar su amor o su odio a través de un libro. Insisto: a nadie. 

Desde el momento en el que nacemos nos están educando en un marco ético-cultural concreto. A través de los libros de texto, de la publicidad, de las leyes y de los medios de difusión y comunicación la sociedad y el estado tratan de imponernos una forma de ser, de ver las cosas, de pensar. Es así y siempre ha sido así: todos los sistemas lo hacen y lo han hecho, desde el comunismo a los fascismos pasando por las democracias occidentales. Aborrezco la figura del educador, del tutor, en cualquier ámbito de mi vida. Del mismo modo que no permito que nadie me diga como tengo que pensar, sobre lo que puedo o no hablar, jamás le diré a otra persona cómo debe pensar o qué debe leer y qué no, mucho menos a una persona adulta. Por eso jamás participaré en una campaña como la de Actuable.es contra el libro homófobo de Richard Cohen, que se vende en El Corte Inglés, en la Casa del Libro y en Amazon.com. Defiendo que cualquier persona tiene el derecho a defender cualquier idea sobre el papel, por mucho que yo personalmente la aborrezca. De hecho me repugna ese libro y eso que no lo he leído -ni falta que me hace.

Me da igual si es un libro homófobo, de la ideología Juche, "Mi lucha" de Hitler, "El fin de la historia" de Fukuyama o una revista pornográfica. Los lectores pueden elegir si comprarlo o no, y los que se enfrenten a cualquiera de esas ideas o argumentos tienen el arma más legítima para refutarlas: sus propias letras. Ese es el único campo de batalla que debería existir entre los libros: los argumentos. Censurar a través de la ilegalización de un libro o realizando un boicot para que se retire de las librerías es una actitud cobarde y estúpida. Cobarde porque todo pensamiento puede ser enfrentado y desarmado a través de la propia palabra. Estúpido porque lo que realmente se consigue con este tipo de boicots es dar publicidad y notoriedad a la obra que se pretende silenciar.

Como regalo a la paciencia y comprensión de los que me leen, aquí el pdf. de "Un Rey golpe a golpe", de Patricia Sverlo.

miércoles, 28 de diciembre de 2011

Santiago Ramón y Cajal: Übermensch

Autorretrato, Ramón y Cajal (colección familiar)
Todos quisieron colmarle de honores. Fue miembro de la Real Academia de las Ciencias, Medalla Helmholtz, Premio Nacional de Moscú, Gran Cruz de Isabel la Católica, miembro de la Real Academia de Ciencias, Doctor Honoris Causa de las universidades de Clark, Boston, la Sorbona y Cambridge, fellow de la Royal Society, Comandante de la Legión de Honor francesa, Senador vitalicio de España, Director de Instituto Nacional de Higiene Alfonso XIII, Medalla Echegaray y, por supuesto, Premio Nobel en Fisiología y Medicina por su aportación a la neurociencia.

Él decía de sí mismo que era un obrero de la medicina. Rechazó todas las ofertas millonarias de Estados Unidos: él quería que todo su esfuerzo y trabajo sirviesen para mejorar su país. Creó la primera beca para que todo aquel que quisiese y no tuviese recursos económicos pudiese estudiar medicina. Rechazó insistentemente cualquier cargo político o título nobiliario que le ofrecieron en vida. Era modesto y solitario.

Pero lo que yo recuerdo de él, a través de mi abuela, es la historia cotidiana de una individualidad inquebrantable. Cuando era pequeño se dedicaba a rascar las pinturas de las iglesias para utilizar los pigmentos para su propios cuadros. Desde muy joven descubrió la pólvora: no tardó mucho en volar la puerta de una Iglesia con un artefacto casero -un experimento explosivo- cuando todavía no sabía la razón de su odio a la Iglesia. Ni le hacía falta. Mi abuela me contaba con orgullo que en un pequeño pueblo donde solían veranear se reían de él por ser un tirillas. Durante el otoño, el invierno y la primavera siguiente estuvo ejercitándose y musculándose compulsivamente. Al volver al pueblo les dio una paliza que recordarían toda su vida. Ya no volvieron a reírse. 

Durante la Guerra de Cuba su familia le había conseguido recomendaciones para tener un buen destino en la isla, sin embargo Santiago no quiso utilizarlas y fue a parar a Camagüey, una de las zonas más peligrosas durante la guerra y donde se encontraba la precaria enfermería de Vistahermosa, donde se trataban a los enfermos más graves de disentería y paludismo. Él lo quiso así. Durante su estancia se enfrentó con casi todos los mandos y oficiales de su propio ejército, que aprovechaban su rango para robar comida y alimentos a los enfermos. Santiago contrajo casi todas las enfermedades que allí trató porque nunca quiso abandonar a los heridos y enfermos pese a las recomendaciones de sus superiores. Tuvo que abandonar Cuba tras contraer paludismo.

En sus últimos años de vida solía pasear por la Cuesta de Moyano con su nieta para comprar libros de segunda mano. Cada vez que se le acercaba un periodista a incordiar él no tardaba ni dos segundos en golpearles con lo que tuviese a mano: un paraguas, un periódico o un libro. Su instinto nunca le falló. Murió en la cama, anotando los síntomas que iba padeciendo mientras se iba muriendo poco a poco, hasta el último minuto, para que sirviese a otros para comprender mejor el funcionamiento de la muerte.

28 de Diciembre

Click en cada imagen para ir al enlace de la noticia.



lunes, 26 de diciembre de 2011

Oυτις / Nemo / Nadie

Retour d' Ulysse, de Louis Frédéric Schützenberger

No,
no somos nadie,
somos Nadie:
como Ulises clavando 
su maza al cíclope
por negarnos el pan;
no herimos a nadie.
Como Nemo,
que renunció a la sociedad
y se suicidó con su tripulación
en el mar
que no es de nadie.
No,
no somos nadie.
Somos todos:
Nadie.

// KILL ALL ARTISTS //


Manifiesto KILL ALL ARTISTS de Tom Sachs (1994), aun vigente:

A lo largo de la historia se ha llegado cíclicamente a un momento en que una llamada a las armas era necesaria. "Ese momento es ahora" (M.F.). Zurich, París, Moscú, Berlín y ahora Nueva York. Hacemos esta acción ahora y aquí, en este barrio, en el nombre de la integridad del arte y con una gran carcajada. Aquí estamos, esta noche, unidos como una piña. Es el amanecer de la próxima revolución. Bienvenido.

Si el arte fuera ilegal y castigado con la muerte, sólo quienes estén dispuestos a arriesgar sus vidas por su trabajo prevalecerán. La posmodernidad sacó a los hámsters de sus despachos y entraron en el mundo del arte defecando la mierda de otros sobre el derecho a soñar, que ha sido anulado y sustituido por la remezcla y refrito de los estilos de ayer en un intento fallido de crear una originalidad que nunca existió. En medio de todo ello estamos nosotros. Nuestro papel amigos, a fin de volver a crear, es el siguiente:
¡MATAR A TODOS LOS ARTISTAS!

jueves, 22 de diciembre de 2011

Tenías razón


Tenías razón. Aunque tú no lo sabías tenías toda la razón. Aunque no fuera la razón la que te moviese, sin duda la tenías. Por eso tu profesora llamó a tus padres preocupada porque se pensaba que eras mudo. Por eso te cambiaste de zurdo a diestro de un día para otro. Por eso dibujabas en las paredes de las casas ajenas. Por algún lado tenías que escapar.

He sido injusto contigo. Lo he sido con mucha gente, pero sobre todo contigo. Durante años has soportado todas mis culpas. Y no sólo las mías, sino las de familiares, amigos, profesores, psicólogos y psiquiatras. Todo se reducía a ti. La ansiedad, culpa de tu timidez extrema. La psicosis, fruto de la imaginación desarrollada durante años de introversión. La agresividad, consecuencia de la imposibilidad de exteriorizar tus sentimientos a tiempo.

Te he fallado, lo sé. Cuando tú y yo coincidimos en el tiempo hicimos un pacto, y lo he roto. Lo rompí al vencer tu timidez con el humor cínico propio de los vergonzosos. Lo rompí al hablarle a los demás de nosotros. Lo rompí al mostrar nuestras pinturas, nuestras letras. Lo rompí al juntarme con aquellos, esos, los demás, de los que tanto nos protegimos. Tenías razón. 

El sueño de vivir anacoretas se esfumó cuando me dejé llevar por todo lo demás. Y lo demás es historia que te he arrebatado sin ni siquiera preguntarte. He fracasado y te he engañado. Tarde o temprano sabías que podría ocurrir, pero yo pensé -cuando pensábamos juntos- que eso jamás ocurriría. Tenías razón.

Ahora lo entiendo todo. Quiero decir que lo he vuelto a entender. He desaprendido todo aquello que nos impusieron y he vuelto a llegar al principio. Sí, al punto de partida de nuevo, al mismo punto donde te dejé. Y ahora, a diferencia de entonces, ya sé cómo funciona todo esto. Ahora ya sé cómo enfrentarme a ello. Quiero pedirte perdón, y el modo de hacerlo es el único que me legitima: estoy enmendando el error. 

No, eso no significa que perdone todo lo que nos he hecho. No me lo perdono, pero la culpa no es lo único que llevo en la maleta de regreso. En todo este tiempo he aprendido a manejarme, más mal que bien, y tengo algunos trucos que podrán servirnos. 

Olvídate de la guerra, ellos la convertirán en negocio. Olvídate del enfrentamiento, de las trincheras. No, no me estoy acobardando, escucha. Esta guerra se juega sin fichas ni tableros. No hay reglas, ni siquiera las nuestras. Toma, coge estas palabras y húndelas en la tierra. Ahora las siguientes, y así hasta que abramos una falla por la que atravesarla. Sígueme, está oscuro porque es mejor así, sin luces que iluminen falsos relieves. Húndete conmigo, hasta que las paredes de tu cuerpo se estrechen tanto que no distingas tu piel de la tierra. Ahí, cúbrete de brea y fuego. Reúnete con el resto de la materia hasta que no puedas deslindar tu cuerpo del resto.

Ya está. Ahora eres nada y eres todo, aquí nadie te molestará. Y si alguna vez tienes frío tiembla, todo su mundo se derrumbará. Y si alguna vez estás triste llora, sus ciudades se inundarán. Pero sobre todo no dejes, bajo ningún concepto, que yo te vuelva a fallar.

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Selbstzerstörung [Autodestrucción]

Yukio Mishima por Shinoyama

Si tengo que caer
me caigo,
si no consigo tropezar busco una piedra
y me tiro.
Si el perro muerde
que muerda,
le acerco la mano y luego la boca:
que sea ahora.

Si alguien grita
si se rompe una botella
si suenan las sirenas
yo voy de cabeza y no me marcho
hasta ser el último mártir
de cualquier causa perdida.

Yo fui cristiano en Roma
luego pagano,
judío en Berlin
luego nazi,
batutsi
luego hutu,
una puta en Pakistán
y un camello en Indonesia:
el infrahombre de Nietzsche,
el último profeta abrazado a una bomba
a punto de estallar.

lunes, 19 de diciembre de 2011

Parte de Guerra V


No somos humildes: el objetivo de la V.O.L.I.A.N.I.H.I.L. en esta fase de la guerra es devolver a la humanidad su animalidad, atacando al Virus desde lo más profundo de nosotros mismos: nuestra identidad. La V.O.L.I.A.N.I.H.I.L declara la guerra a nuestras identidades de forma permanente y sin tregua hasta la victoria o la muerte, que viene a ser lo mismo.

La idea del Yo no es innata al ser humano: es una construcción posterior individual, social e histórica. En el momento en el que nacemos no tenemos ninguna concepción del yo, no existen fronteras entre nosotros y todo lo demás. Nacemos en un estado indiferenciado de fusión con el mundo, sin autoconsciencia. El Yo va surgiendo y afianzándose durante el proceso de la adolescencia, donde se desarrolla la impresión subjetiva de un Yo propio paralelamente a la maduración de las estructuras corticales y en interacción con el entorno en el que vivimos. Es decir el Yo es una entidad dependiente de la cultura en la que crecemos. Por eso el proceso de construcción del Yo está condicionado por elementos externos que nos impiden ser nosotros mismos: es el entorno -la cultura y la sociedad- el que imprime el carácter de la identidad individual de cada persona. Por eso no es de extrañar que la primera identidad moderna sea del Yo frente al mundo.

La V.O.L.I.A.N.I.H.I.L. reivindica el Yo como parte indisoluble del mundo y declara la guerra a las identidades.

El Virus es omnipresente. No abarca ningún territorio determinado, no tiene bandera, no está representado por nadie aunque existan elementos humanos que lo personifiquen con más virulencia que otros durante un periodo de tiempo concreto y limitado. El Virus es una  enfermedad exógena que se instala en cada uno de nosotros a lo largo de nuestra existencia. El proceso de la llamada madurez es el punto álgido de la infección, la culminación de la primera etapa vírica, el momento de su completa vinculación orgánica con cada individuo. 

La V.O.L.I.A.N.I.H.I.L. por lo tanto declara a la infancia como sujeto revolucionario de primer orden. Hemos establecido contactos con grupos insurrectos del K.I.N.D.E.R.G.A.R.T.E.N. y con elementos aislados de parvulario para iniciar la ofensiva contra las identidades y contra el llamado "mundo adulto", segmento de la población humana donde se evidencia la mayor concentración de infectados y donde hemos identificado el mayor número de apologistas del Virus.


Somos los no domesticados
¡Temednos!
¡ESTO O NADA!

viernes, 16 de diciembre de 2011

El eslabón más débil de la cadena

Como la rama que cede ante el peso de la nieve
como el soldado que se ahoga en el desembarco de Normandía
como el tobillo que se rompe al comienzo del desfile
o el barco que se hunde tras el impacto de la botella de champán.
También soy
el tirador sin puntería de un pelotón de fusilamiento
el carcelero despistado que se deja las llaves dentro
el eslabón más débil de la cadena de montaje
de un carro de combate o de un misil tierra aire
que no
podrá
jamás
matar.

miércoles, 14 de diciembre de 2011

Ata a tu perro

Talibán
ata a tu perro
maricón
ata a tu perro
skinhead
ata a tu perro

Loco de mierda
ata a tu perro
joder

Ata tú a tu hijo de primaria
ata tú a tu mujer depresiva
ata tú a tu coche deportivo
ata tú a tu jefe directivo
átate tú del cuello a esa rama
que yo te quito
la silla de debajo.

lunes, 12 de diciembre de 2011

(Ella) El frío

Decían que estaba demasiado fría,
que mis encías sangraban como una piara de cerdos,
que miraba con ojos de cabeza de pescado,
yo,
que con cada crujido de nudillos espantaba a los cuervos,
yo,
que con cada costilla, que con cada tibia rota
cargaba las nubes y despertaba
los truenos.

Decían que estaba demasiado fría,
por eso nadie me oyó gemir
a dos metros bajo tierra.

sábado, 10 de diciembre de 2011

Aburrimiento

Confieso que nunca me he aburrido,
que el tiempo entre dos momentos
lo he consumido siempre
a dentelladas,
que cada rato improductivo
lo he utilizado para algo
aunque no hiciese nada,
que el sueño y el silencio
me han servido de refugio
cuando fuera
todo era
demasiado algo.

jueves, 8 de diciembre de 2011

Parte de Guerra IV

 
Declaración de guerra de la V.O.L.I.A.N.I.H.I.L. al modo condicional.

Reunidos los impresentables de la V.O.L.I.A.N.I.H.I.L. en algún lugar de la selva ecuatorial madrileña acordamos y afirmamos el inicio irrevocable de la guerra sin cuartel contra cualquier evento o uso contrafactual, contra la prótasis y la apódosis, contra cualquier potencial. Llamamos a nuestros hermanos finlandeses y estonios a luchar contra el eventivo; a nuestros amigos siux, rusos y miembros del pueblo mixteco a combatir contra el hipotético; a toda la humanidad y animalidad a sumarse a nuestro frente contra el contubernio de lo irreal.

Agotadas las vías diplomáticas y cansados de recibir respuestas ambiguas por parte del modo condicional nos hemos visto en la obligación de llamar a las armas a todos aquellos que desean combatir la realidad realmente existente desde la lógica de los hechos realmente ocurridos. Agradecemos al pueblo Mbuti -especialmente a sus mujeres- y al resto de las tribus pigmeas su gesto valiente al adherirse a nuestra causa sin ningún tipo de vacilación. La V.O.L.I.A.N.I.H.I.L. por su parte ha recogido y asumido como propia la idea de hermandad entre todos los miembros de la tribu, donde los niños y las niñas juzgan a sus mayores, donde los mayores son padres y madres de todos y cada uno de los niños sin distinción ni rémora genética.

Somos conscientes de la envergadura y la importancia del modo condicional en las sociedades occidentales. Sabemos que tenemos todas las de perder, que perderemos. No nos importa. La rectitud de la palabra VICTORIA no nos amedrenta: nosotros somos personas curvas de ideas curvas.

Frente al podríamos nosotros podemos,
frente al haríamos nosotros hacemos.
frente al querríamos nosotros queremos,
frente a vosotros,
nosotros somos.

¡ESTO O NADA!

miércoles, 7 de diciembre de 2011

Proyecto de Crowdfunding: DOPAMINA E-diciones

Hace tiempo que le estábamos dando vueltas a la idea de crear una editorial digital que publicara libros electrónicos baratos y de calidad. La mayoría de los libros electrónicos que actualmente se comercializan son u obras clásicas o ediciones digitales de grandes editoriales. Existen algunas excepciones como la serie de cuentos de sigueleyendo.es, entre otras pocas. Queríamos que las obras publicadas estuviesen editadas copyleft con licencias Creative Commons. Y por último queríamos organizar un concurso literario completamente transparente que premiase la calidad de autores nóveles, dotado económicamente, para dar a conocer y promocionar buenos escritores sin importar su nombre o su relevancia pública.

Pues bien, ya hemos lanzado nuestro proyecto: DOPAMINA E-diciones.

Hemos elegido el método de financiación del crowdfunding a través de la web Lánzanos porque es una fórmula de mecenazgo que complementa perfectamente el espíritu de nuestra iniciativa. Nuestro objetivo es editar narrativa, poesía, cuentos, novelas gráficas y cualquier otro estilo editable de calidad o de interés, centrándonos sobretodo en autores nóveles que por distintas causas quieran publicar en este formato: autores que crean en la filosofía del procomún o autores cuyas obras, pese a su calidad, hayan sido rechazadas por las editoriales tradicionales por no ser comercialmente viables (por no ser famosos, porque su contenido no es políticamente correcto, etc.).

La idea es que las obras se publiquen en formatos PDF. y ePub para que puedan ser leídos tanto en cualquier tableta electrónica como en el ordenador, además de poderse imprimir para los amantes del papel. Libros baratos porque creemos que sólo la calidad y un precio justo hacen que merezca la pena adquirir la obra de un autor. Y con una remuneración justa y equitativa para los autores: la mitad para ellos y la otra mitad para que el proyecto siga funcionando (frente a la escandalosa desproporción actual de las empresas editoras). El propósito de la iniciativa DOPAMINA E-diciones es el de ser una plataforma alternativa para una nueva forma de editar y de leer, abriendo nuevos canales de comunicación entre escritores (o ilustradores) y lectores para fomentar la participación de todos en este nuevo modelo.

La etapa actual de esta iniciativa es la de buscar apoyo a través del crowdfunding aquí:  

Si tenéis alguna duda de cómo funciona esto: leed.
Si os queda alguna otra duda, o teneis alguna idea que aportar, poneos en contacto con nosotros en este email: edicionesdopamina arroba yahoo.es

Tenemos 71 días para lograr el objetivo, así que cualquier ayuda o idea será siempre bienvenida. Dado que es un proyecto conjunto lo ideal es comunicar con nosotros a través del email que he puesto antes. Se agradecería cualquier tipo de difusión y colaboración. Iremos informando puntualmente sobre el estado de la iniciativa a través de distintos canales (entre ellos este blog).

lunes, 5 de diciembre de 2011

(Ella) Segunda oportunidad

Deja que tus dedos se congelen
desde dentro,
hasta que comiencen a arder.
Deja que tus pupilas se dilaten
con la noche,
mirada de alquitrán.
Deja que el sol te abrase
hasta que hierva la piel
y se te quemen los huesos.
Entiérrate en un desierto
con buitres,
sólo entonces
nos volveremos a ver.

jueves, 1 de diciembre de 2011

Fue en Madrid

Al principio fue un juego:
llamábamos a la casa piso franco,
a la biblioteca almacén de armas,
salir a fumar hacer la ronda.

Luego nos convertimos en un comando:
el coche, infraestructura de transporte,
la limpieza semanal en zafarancho de combate.

Convertimos los actos sencillos
en categorías trascendentes 
de resonancia militar.

Un día te marchaste a por provisiones
y nunca mas regresaste.
Hice acopio de armas y pertrechos
y desde entonces
no he dejado de disparar.